
El machine learning, una rama de la Inteligencia Artificial (IA), tiene tres componentes fundamentales: los algoritmos, los datos de aprendizaje y el consiguiente modelo generado. Un algoritmo, en esencia, es un grupo de procedimientos que aprende a reconocer patrones a partir de un amplio set de ejemplos, proporcionados por los datos de entrenamiento. Como resultado de este proceso de aprendizaje, se obtiene un modelo de machine learning. Para ilustrar, un algoritmo que se entrena con imágenes de perros, daría como resultado un modelo capaz de reconocer caninos en otras imágenes.
El fenómeno de la caja negra en machine learning
En el machine learning, cualquier componentes de los tres mencionados (algoritmo, datos de entrenamiento o modelo) puede convertirse en una caja negra. Aunque los algoritmos suelen ser de conocimiento común, los desarrolladores pueden decidir mantener en secreto el modelo o los datos de entrenamiento con el fin de proteger la propiedad intelectual. Esta falta de transparencia complica la comprensión del proceso de toma de decisiones de la IA.
Las cajas negras de IA representan sistemas en los que el funcionamiento interno es opaco o invisible para los usuarios. Los usuarios pueden introducir datos y obtener resultados, sin embargo, la lógica o el código que genera los resultados permanece oculto. Esta es una característica habitual en muchos sistemas de IA, incluyendo los modelos generativos avanzados como ChatGPT y DALL-E 3.
Los LLM como GPT-4 suponen un desafío importante: su funcionamiento interno es en gran medida opaco, convirtiéndolos en «cajas negras». Tal falta de transparencia no es solo un enigma técnico; plantea preocupaciones éticas y de seguridad en la vida real. Por ejemplo, si no podemos entender cómo llegan a sus conclusiones, ¿cómo podemos confiar en ellos en áreas tan críticas como los diagnósticos médicos o las evaluaciones financieras?
La escala y complejidad en los modelos LLM
Con estos modelos, el incremento de su escala trae consigo un aumento de su complejidad. Por ejemplo, el GPT-3, con sus 175 billones de parámetros, y los modelos más recientes con incluso billones más. Cada parámetro interactúa dentro de la red neuronal de manera compleja, aportando a capacidades emergentes que no se pueden predecir únicamente examinando componentes individuales. Esta escala y complejidad hacen que sea prácticamente imposible entender completamente su lógica interna, lo que dificulta el diagnóstico de sesgos o comportamientos no deseados en dichos modelos.
El equilibrio: Escala vs. Interpretabilidad
Si se reduce la escala de los modelos LLM, se podría mejorar la interpretabilidad, pero podrían perderse algunas de sus avanzadas capacidades. La escala es lo que permite que los modelos desarrollen comportamientos que los modelos más pequeños no pueden lograr. Esto presenta un equilibrio inherente entre la escala, la habilidad y la interpretabilidad.
LEE MÁS ARTÍCULOS SOBRE: Ciencia de Datos con IA.
LEE LA ENTRADA ANTERIOR: Google Gemini IA multimodal: una inmersión técnica profunda.