Cuantitativamente, cuanto mayor es un objeto, mayor es la fuerza necesaria para moverlo. Con una capitalización de mercado de 800 mil millones de dólares, mover Tesla (TSLA -1.86%) requiere mucha fuerza. En los próximos años, la compañía tendrá que generar un valor significativo para mantener el impulso ascendente de su acción. Según el analista de Morgan Stanley, Adam Jonas, esto puede venir a través de sus inversiones en inteligencia artificial (IA) y tecnología de conducción autónoma.
Jonas reafirmó su recomendación de «sobreponderar» la compra de las acciones de Tesla y estableció un objetivo de precio a 12 meses de $380, lo que representa una ganancia del 46% desde su precio actual. El analista cree que el potencial de Tesla para convertirse en una compañía tecnológica diversificada ofusca los vientos en contra a corto plazo en sus operaciones automotrices. Veamos más a fondo lo que el futuro podría tener reservado.
La ventaja del Dojo
Se ha descrito a los coches autónomos como el «proyecto de IA más grande de todos» debido a la complejidad que supone lidiar con una gran cantidad de datos en tiempo real e impredecibles. Hacer que el concepto funcione puede requerir una forma hipotética de IA llamada inteligencia artificial general (AGI), que permita al software pensar y aprender al mismo nivel que un humano. Y como uno de los líderes en la carrera por la plena autonomía de la conducción, Tesla puede llevar la delantera en el desarrollo de una tecnología mucho más transformadora.
Para Jonas, la ventaja de Tesla se centra en Dojo, un superordenador que está construyendo para entrenar modelos de aprendizaje automático y de conducción totalmente autónoma. Dojo procesa enormes cantidades de datos de conducción generados por los vehículos de Tesla en escenarios del mundo real. Y más importante aún, está utilizando estos datos para desarrollar visión por computadora, un posible precursor de la AGI, con aplicaciones en muchas otras industrias, como la robótica, la salud y la seguridad.
A medida que avanza la tecnología, Jonas cree que Tesla podría comenzar a generar ingresos significativos a partir de la venta de software y licencias, lo que representa la próxima etapa de su historia de crecimiento.
La realidad, probablemente, será intermedia
Aunque las proyecciones de Jonas suenan posibles, dependen de muchas suposiciones. La más importante es que Tesla logrará un éxito total en la conducción autónoma en un futuro próximo, lo cual está lejos de ser seguro. La segunda es que otras compañías estarán «durmiendo» y no ofrecerán una competencia significativa a su software de visión por computadora.
Pero incluso si los resultados de Tesla quedan por debajo de las elevadas proyecciones del analista, los inversores aún pueden apostar por los muchos otros motores de crecimiento de la compañía.
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A pesar de que el negocio automotriz principal de Tesla se encuentra bajo presión a corto plazo, los desafíos como las altas tasas de interés parecen estar listos para aliviar en los años venideros, lo que aumentará la demanda de vehículos nuevos. Además, la promesa de la gerencia de reducir a la mitad los costos en los vehículos de próxima generación de Tesla empieza a dar frutos.
Según el CEO Elon Musk, Tesla está trabajando en un coche de $25,000 denominado Modelo 2, que podría llegar en 2025. Esto sigue a un informe de Reuters de que la compañía planea construir un coche de 25,000 euros ($26,863) para el mercado de la UE en su fábrica en Berlín, Alemania. Los autos más baratos podrían ayudar a Tesla a lograr su objetivo a largo plazo de convertirse en un fabricante de automóviles de masa y ayudar a compensar las disminuciones de margen con un mayor volumen de producción.
¿Qué sigue para los inversores?
Entrando en 2024, Tesla ya no es la compra tan atractiva que era a principios de 2023. Con una relación precio/beneficio (P/E) futura de 74, la compañía vuelve a ser una venta difícil para los inversores orientados al valor. Sin embargo, Tesla tiene un historial de demostrar que los escépticos están equivocados y justificar su precio premium.
El comentario alcista de Jonas destaca la posibilidad de que Tesla se convierta en algo más que un fabricante de automóviles eléctricos. Y los accionistas podrían ser recompensados de manera generosa si logra incluso una fracción de su elevada visión. Para mí, la acción todavía es recomendable comprar o mantener con optimismo hasta que esté disponible más información.
No son consejos sobre inversiones, tan solo análisis de la información.
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